Puesto que tanto esta de moda el Caso Palmarena de nuestro querido principe el UrdanPillin, os narraré una historia pedricera, en la que
un@s valientes
calicer@s osaron pisar tierras graniticas, alli donde lo más preciado son los granitos tamaño lenteja y ya lo más de lo más sería encontrarte con una "seta" u, o y fisura que no sea ciega.
Sus nuevos compañeros pedriceros les explicaron como colocar las caderas bien pegadicas a la roca, apoyar la mayor superfie de los gatos y sobretodo como escalar con "LA PALMA ABIERTA". La pequeña conejica, apodada como "La nervios" y no miro a nadie....no daba credito a este tipo de roca.... sin presas, sin cazos, sin naaaaaaa y sobretodo y ante todo ESOS PRECIADOS PARABOLES, quién coño los ha subido tan arriba!!!! tan lejos unos de otros, tan taran tantan....
Y en esas andabamos, cuando podíamos claro!!! porque a veces no eramos capaces ni de salir del suelo... Tanto entreno de resistencia, tanto roco, desplomes, series, para.......??????? para total escalar CON LA PALMA ABIERTA!!!!!!!!
Que niña muerta(monster high), ni que niña muerta!!!! gritaba la Tia Glori desde la reu.... yo lo que le he pedido al Olentzero son agarres como puños, no como Truños.....
Madre mia, madre mia si miro por doquier y todo me parece tan bonito que me apetece seguir soñando en escalarlo TODO, todo, todo....
Diego nos iba mostrando el camino, nos enseñaba lugares secretos, alejados de los caminos principales como la laguna escondida cercana al Yelmo, y con cada forma, con cada risco nos venía a la imaginación, formas de animales, de aliens venidos de otros planetas... pero siempre con la idea fija en subirnos algún día por sus paredes, eso si.....seguramente que ...con LA PALMA ABIERTA.
De repente visualizé un risco con una línea de fisuras, en el que cabía la posibilidad de ascender de otra manera, que no fuese pegada a la roca como una lapa o lagartija:
Para lo que tuve que empotrar pies, hacer hasta cerrojos de mano, pero....siempre acababa escalando (rezando) con la palmabierta.
Y asi pasaban las horas y los minutos, cada vez más deprisa, no daban tregua y el sol iba cayendo y llegaba la hora de partir de vuelta a nuestras tierras caliceras y más frias. En nuestro interior se apelotanaban tantas y tantas sensaciones, que en nuestra cara unicamente se reflejaba una unica expresión... la sonrisa (una vez en el suelo claro, porque teniais que ver los jetos que poníamos cuando escalabamos...).
Sin previo aviso, se me acercó Diego el pedricero y con una leve y mágica sonrisa, me hizo una gran confesión:
-Ana.... sabes el secreto de la escalada en la pedriza???
-Pues no sé, Diego... como no sea , calzar un 45 de pie que te deje más base para poder dormirte en plena pared... no se me ocurre.
-Te diré que el gran secreto reside en nuestro interior, reside en calmar los nervios, en llevar una respiración acompasada, y .............. en disfrutar de cada movimiento, en cada palmada.... y en llevar unos pies de gato con truco,ja.ja....
Pies de gato con una goma especial integrada más rigida, que sólo los mas frykys pedriceros conocen, y entre grandes risotadas nos fuimos despidiendo con la promesa de volver a este magnifico paraje. La Pedriza. ....."y colorín colorado...yo la palma ya he cerrado"....
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